La vitamina C o ácido ascórbico es un básico imprescindible.
La vitamina C no es el único antioxidante que existe, ni tampoco el más potente, pero es uno de los compuestos que mejor se ha conseguido estabilizar para garantizar su eficacia cosmética, a pesar ser muy sensible al calor y degradarse con facilidad. Pero gracias a las formulaciones en frío se evita este problema y la vitamina continúa siendo activa. Los cremas y sérums han mejorado la cosmeticidad; es decir, su aroma, absorción, textura… pero no todos son iguales y debemos reconocerlos a la hora de elegir para incorporarlos a nuestra rutina de cuidado y belleza diarias.
Los beneficios de la vitamina C pura en la piel son muchos y muy interesantes, sobre todo como principio activo básico anti-age y antiarrugas.
¿Cuáles son los efectos de la vitamina C en el cutis?
1. La acción fundamental de la vitamina C es como antioxidante, y es imprescindible durante la exposición al sol y también en personas fumadoras porque contrarresta los efectos de los radicales libres, tanto los producidos por la radiación solar como por el humo del tabaco. Ya que la piel es la primera barrera de defensa contra las radiaciones, la acumulación de radicales libres durante la exposición solar es mayor a los que el organismo puede eliminar, por tanto, el uso de cosméticos con ácido ascórbico puro y una dieta rica en elementos minerales, es muy importante. Esta acción protege al colágeno y la elastina de la degradación, por tanto tiene una acción anti-edad.
2. La vitamina C estimula la síntesis de colágeno en la piel a nivel de la dermis (capas internas de la piel), para evitar el descolgamiento de los tejidos y mantener la firmeza y por tanto, tiene una acción anti-arrugas. A partir de los 30 años comenzamos a sintetizar menor cantidad de colágeno tipo III en la piel y por eso, es imprescindible, al menos 2 o 3 veces al año, utilizar cosméticos que contengan vitamina C pura y estabilizada para que sea activa.
3. La vitamina C también tiene una acciónblanqueante (despigmentante) sobre las manchas, por lo que ayuda a prevenirlas y también a reducirlas. Además es un básico por aportar mucha luminosidad y uniformidad al tono de la piel.
Utiliza cosméticos que garanticen la calidad de la vitamina C, es básico para que la molécula sea activa.
Ya que en muchos productos pone que contiene vitamina C, pero debe garantizar unaconcentración mínima para que sea efectiva y unos procedimientos de elaboración por los que no se haya degradado la vitamina, ya que como hemos dicho es extremadamente sensible al calor. Y por tanto la calidad en elenvasado y distribución del cosmético también deben estar controlados.
Para pieles jóvenes: como tratamiento básico los meses de exposición solar os recomiendo utilizar una crema que contenga vitamina C. Aplícala por la noche y también por la mañana antes del fotoprotector. Y podéis repetir para la Navidad.
Para pieles agredidas por el sol o dañadas:combina la vitamina C por la noche antes de tu crema habitual, con las ampollas regeneradoras Matricium de Bioderma por la mañanas antes de tu crema. Estas ampollas son increíbles para recuperar la firmeza y la luminosidad en pieles apagadas, porque contienen los mismos componentes que la matriz de nuestras células y por eso es 100 % biocompatible, además son ricas en todos los minerales y vitaminas necesarios para regenerar la piel. Este tratamiento combinado dura 1 mes, podéis hacer tandas con estos dos productos 3 o 4 veces al año y el aspecto de vuestro cutis cambiará por completo.
Para pieles maduras: utiliza durante los meses de verano un sérum concentrado en vitamina C, 2 veces al día. Antes y después del verano realiza dos tratamientos con las ampollas Matricium de Bioderma.
Además en todos los casos os recomiendo las cápsulas solares de Solar Complex Neo que contienen vitamina C, ácidos grasos omega 3, licopeno, etc. Y hacer una dieta rica en frutas y verduras frescas.
¡No dudéis en pedirnos consejo!
